tag:blogger.com,1999:blog-34897689716057073052024-02-06T20:57:22.173-08:00Nube de palabras.Este blog, esta creado por algunas personas de PA, con el fin, de hacer una Historia Colectiva entre todos, y que disfruten de la imaginación, que todos nosotros tenemos y que dejamos volar, con nuestras historias y dibujos, porque, creemos que la insipiración, no hace bien dejandola dentro...Unknownnoreply@blogger.comBlogger7125tag:blogger.com,1999:blog-3489768971605707305.post-74800238219549049692012-08-11T10:11:00.001-07:002012-08-11T10:11:52.172-07:00SOMEWHERE OVER THE DEATH. CAP4SIENTO MUCHISISISISISISISISIIIIMO HABER TARDADO TANTO,PERO ERA UNA ESPECIE DE VENGANZA A COTIC POR IRSE... PERDÓN V.V''<br />
KAMI-CHAN<br />
**************<br />
<br />
<br />
SAWN<br />
***************<br />
<style>
<!--
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<br />
<div class="MsoNormal">
-Hostia…- digo, observando el cuerpo inmóvil de la mujer
rubia. Estaba muy apaleado, con varias rascadas y moratones. Y la piel ya no
parecía humana, era<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>totalmente
blanca, adornada con el lila azulado de los moratones, eso sí. En el cuello
tenía la marca de una soga, de la cual se veía una gran parte en el suelo, y
las muñecas estaban rasgadas, con trozos de sangre reseca. En el suelo, también
se había solidificado el líquido.</div>
<div class="MsoNormal">
-¡Oye, esto no es normal!- empieza a chillar Rossana
histérica.</div>
<div class="MsoNormal">
-Rossana, cálmate… Cálmate… ¡¡Rossana!!- Tamara iba de mal
en peor.</div>
<div class="MsoNormal">
-Joder, joder, joder…- Nathan no estaba en su mejor momento,
se tiraba de los pelos que le salían por debajo del gorro.</div>
<div class="MsoNormal">
El único que quedaba era yo, de pie, con todos esos
histéricos dando vueltas a mi alrededor. Cómo siempre, pensé de una forma
objetiva:</div>
<div class="MsoNormal">
-“Sawn, céntrate. Cadáver, más los histéricos estos…
¡Policía!”</div>
<div class="MsoNormal">
Saqué mi Samsung Galaxy y tecleé el numero de el cuerpo de
policía local. De paso, miré la hora. No podría cumplir la promesa que le hice
a mi madre de estar en casa antes de las doce.</div>
<div class="MsoNormal">
Me cogió el una voz aburrida.</div>
<div class="MsoNormal">
-¿Qué desea?</div>
<div class="MsoNormal">
-Hola, querría denunciar un asesinato… Bueno, una
muerte.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span></div>
<div class="MsoNormal">
-¿Cómo?- dijo el hombre del otro lado del interfono con un
hilo de interés en su voz.</div>
<div class="MsoNormal">
-¡Qué hay una cadáver, coño!-le espeté desesperado.</div>
<div class="MsoNormal">
-“NO ME PUEDO PONER HISTÉRICO”- me dije.</div>
<div class="MsoNormal">
-¡Tranquilo, ¿dónde está?!</div>
<div class="MsoNormal">
-¡Y yo que sé! ¡Estábamos en una fiesta en las carpas y no
sé como hemos llegado aquí, y vimos la casa y…!</div>
<div class="MsoNormal">
Nathan, Tamara y Rossana no se dieron cuenta de que había
llamado, y siguieron chillando como niñas de cinco añitos viendo Rec.</div>
<div class="MsoNormal">
-¿Está con alguien más?</div>
<div class="MsoNormal">
-Sí, pero ahora mismo no sirven de nada, por si le interesa.</div>
<div class="MsoNormal">
-Vale, salga de dónde esté y mira la dirección de la casa. </div>
<div class="MsoNormal">
Corrí escaleras abajo y en la imponente verja encontré (en
muy mal estado) un cartel en el que ponía: “Calle Alberto Tallín, número
trece.” Se lo comuniqué al teleoperador de policía.</div>
<div class="MsoNormal">
-Caballero, ahora va una patrulla, ¿le parece?</div>
<div class="MsoNormal">
-No, no me lo parece.- le espeté sarcástico- ¿¡No le jode!?</div>
<div class="MsoNormal">
-Señor, cálmese, tranquilo.</div>
<div class="MsoNormal">
-¡En eso estoy!- le dije por última vez y le colgué. </div>
<div class="MsoNormal">
Corrí escaleras arriba de la casa y se lo comuniqué a mis
“amigos”. </div>
<div class="MsoNormal">
-Está apunto de venir la policía, vayamos a esperarla al
jardín. Y así de paso… Os calmáis.- les dije.</div>
<div class="MsoNormal">
-Vale, vale…- Dijo Nathan.</div>
<div class="MsoNormal">
-Sí, será mejor.- dijo Rossana.</div>
<div class="MsoNormal">
-No. Me niego. ¿Y si hay más víctimas? Creo que tendríamos
que ver el resto de la casa. </div>
<div class="MsoNormal">
-Sí, con esto.- dije señalando mi linterna de manivela.- ¡No
somos Indiana Jones!- no sé por qué, pero cuando pasan cosas raras y la gente
se pone histérica, yo me pongo sádico, sarcástico e insoportable.</div>
<div class="MsoNormal">
-Pues… Yo creo que tendríamos que hacer caso a Tamara.-
cambió de opinión Nathan.</div>
<div class="MsoNormal">
-¡Joder! ¿¡Es que nadie tiene ni un poco de sentido común!?</div>
<div class="MsoNormal">
-Di lo que quieras, pero yo voy con ellos.- dijo Rossana
entre lágrimas.- Imagínate que hay la familia entera y que la policía no
encuentra a los demás. ¡Yo creo que es muy cruel no poner nada de nuestra
parte!</div>
<div class="MsoNormal">
-¡Oj! ¡Sois como unos niños pequeños!</div>
<div class="MsoNormal">
-¡Oye, si quieres te quedas esperando al asesino o a la
policía sólo fuera, eh!</div>
<div class="MsoNormal">
Tragué salva y aquél ultimátum de Rossana. La chica estaba
bastante afectada por el hecho de ver a aquélla mujer.</div>
<div class="MsoNormal">
-Vale, vamos a ver la casa, ¡pero sólo un momento, que si
viene la poli, no ve a nadie y se piensa que es una broma…!</div>
<div class="MsoNormal">
-Sí, sí…</div>
<div class="MsoNormal">
Fuimos en grupo hasta el baño. O algo que lo parecía. Habían
arañazos en la puerta, los azulejos estaban medio rotos y olía a lejía desde
dos metros lejos de la puerta cerrada.</div>
<div class="MsoNormal">
-Alguien ha limpiado algo con mucho esmero…-dije.</div>
<div class="MsoNormal">
-Ya ves…- dijo Nathan molesto por el aroma a desinfectante.</div>
<div class="MsoNormal">
-Sigamos, por favor.- nos rogó Tamara.</div>
<div class="MsoNormal">
Por un pasillo lleno de telarañas llegamos a algo que
parecía una cocina. Tenía un horno, unos fogones de gas, una nevera y una mesa
con cuatro sillas. La nevera era bastante pequeña, y tenía un único imán que
sujetaba un dibujo. Estaba claramente hecho por alguien de menos de ocho años.
En el dibujo se podían intuir una mujer adulta (por los tacones) y una niña.
Debajo de las dos había escrito “Mamá; Yo”.</div>
<div class="MsoNormal">
-Tenía una hija…- se derrumbó Rossana</div>
<div class="MsoNormal">
-A lo mejor no era para esa mujer…-dije, intentando
calmarla.</div>
<div class="MsoNormal">
-Mi… mirad eso…-señaló tembloroso Nathan.</div>
<div class="MsoNormal">
Tamara ahogó un grito al ver el chuchillo manchado de sangre
encima de la encimera. Había una mancha del fluido, pero se había secado.</div>
<div class="MsoNormal">
-La mujer tenía cortes en las muñecas. Seguramente se
suicidó, ya que tenía la marca de una cuerda en el cuello. Estoy casi seguro de
que era una masoquista.- razonó Nathan</div>
<div class="MsoNormal">
-Sí, y desinfectó el baño, no vaya a ser que cuando alguien
viniera a buscar el cadáver, fuera al baño y le diera mala impresión.- le
corté.</div>
<div class="MsoNormal">
-Qué mala espina… Marchémonos de esta sala, por favor.- dijo
Nathan.</div>
<div class="MsoNormal">
Entonces llegamos al salón El salón. Casi teñido de rojo del
todo.</div>Unknownnoreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-3489768971605707305.post-84539153876755758342012-03-16T14:19:00.001-07:002012-03-16T14:20:30.223-07:00Somewhere over the dead. Tercera parte.<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">En primer lugar: Gracias Besa por los dibujos ^.^</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">En segundo lugar: esta parte también la he hecho yo (Cotic) por una desertora de última hora. No vale demasiado (nada) pero si no la leeis no podreis leer la siguiente, que si que esta escrita por una escritora en condiciones como es Kami ;) (chantage XD)</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;"><br />
</span><br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg2QVUE5BM6JJRzhDnyi4BY5IudIDEo9q5gnsALNaxg_XK6Lnbsf8-t2MKepwXSfKYLi1lBZf5ySmgM4UQHxefvxhqxDKIBBFda073yVhjSTaC9YQBSL0kfHzfHqyllSKYRdHd2sm7VSGs/s1600/Tamara+retocada.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><span style="color: #134f5c; font-family: inherit;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg2QVUE5BM6JJRzhDnyi4BY5IudIDEo9q5gnsALNaxg_XK6Lnbsf8-t2MKepwXSfKYLi1lBZf5ySmgM4UQHxefvxhqxDKIBBFda073yVhjSTaC9YQBSL0kfHzfHqyllSKYRdHd2sm7VSGs/s320/Tamara+retocada.jpg" width="250" /></span></a></div><span style="color: #134f5c; font-family: inherit;"><br />
</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;"><br />
</span><br />
<div style="font-size: 14px; line-height: 20px; margin-bottom: 16px; margin-top: 8px; padding-bottom: 0px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 0px; text-align: left;"><b><u><span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">TAMARA</span></u></b></div><div style="font-size: 14px; line-height: 20px; margin-bottom: 16px; margin-top: 8px; padding-bottom: 0px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 0px; text-align: left;"><span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Caminamos juntos, nos hemos separado un momento del grupo, porque estaban demasiado…obsesionados, con nuestro destino (un montón de chicas fáciles, en mini vestidos, con escotes generosos…). Es lo que tiene ir con estos. Nos dirigimos a la fiesta, claro, pero quiero hablar con él antes de que se vuelva mudo de nuevo, no es muy hablador, que digamos.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-¿Y qué Sawn? No entiendo porque les dejas. Se lo dices, y punto.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Ya, pero… no es tan fácil ¿sabes?…</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Mira, si no les gusta, ajo y agua, pero esto no es justo.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Ya, bueno… ¡Mira! ¡Allí están las carpas! Seguro que los chicos ya habrán entrado a PC…</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-¡No cambies de tema!</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Se sonroja.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Mira, Tamara, centrémonos en divertirnos hoy, otro día me das la taba…otro día hablamos.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Mañana. Y no me valen excusas, si hace falta, voy a tu casa yo misma…</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-¿Mañana? No sé… no es buen momento… ¿Qué tal… el lunes?</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-¿El lunes? ¿Qué lunes? ¿El del año que viene? La semana pasada me dijiste que hoy. Mañana. Y no se hable más –Añado, tras ver su cara de “estoy-pensando-una-excusa”.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Baja la cabeza, derrotado. Aprovecho este momento para quitarle la gorra gris, y echo a correr hacia las carpas, a las que cada vez nos acercamos más. El corre tras de mí. Acabamos el poco trecho que nos separaba de P.C. Una vez dentro, se la devuelvo, él tapa su pelo rubio con ella, para variar. Clava sus ojos verdes en los míos (de un verde grisáceo raro), sin decir nada. Desvío la mirada, incómoda. Y… como no, alguien viene a estropear el momento. Mike viene contentísimo hacia nosotros, tiene una sonrisa deslumbrante:</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-¡Ey! ¿Qué te pasa? Parece que te haya tocado la lotería.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Sawn asiente, con una sonrisa, dándome la razón.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-¡Casi! ¡Sandra ha caído bajo mis (numerosos) encantos!</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Y hace una pose de culturista típica, resaltando su musculatura.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-¡Oh! Felicidades tío.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Sawn sonríe más abiertamente, pero esa sonrisa no llega a sus ojos. En cuanto se va, la borra de su cara:</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Pobre.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Asiento, con un suspiro.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-¿Cuánto crees que durará?</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Tendrá suerte si no le rompe el corazón en un par de días.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Me giro, para encontrarme con Teo, otro amigo… que ya está bebido.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">“Si que se ha dado prisa” Sawn vocaliza sin emitir sonidos, para que no le oiga. Teo me mira, intentando parecer seductor, y pide que vayamos a fuera:</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Oye, que guapa estás…</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Vale, se nota que estas borracho ¿Qué quieres?</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Él se acerca, y, peor todavía aproxima alarmantemente su mano a zonas peligrosas «sabía que no debía llevar una camiseta como esta». Antes de que esa mano llegue a su destino, lo dejo tumbado en el suelo con una llave. Lo miro con frialdad, mientras comento:</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Si lo intentas de nuevo… que dios te pille confesado Teo.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Y le pego una patada en las costillas. El suelta un gemido de queja, que yo ignoro deliberadamente. Vuelvo a la carpa, fuerzo una sonrisa, y voy con Sawn de nuevo, que no se ha movido de la barra.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-¿Qué quería?</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Nada.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">«Este es uno de los inconvenientes de ir por ahí con tíos como estos». Tras un cuarto de hora estando ahí plantados sin hacer nada más que esquivar a los bebidos, decidimos irnos.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Una vez haciendo camino hacia nuestro barrio, se queda mirándome de arriba a abajo:</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-¿Qué pasa?</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Miro mi ropa de nuevo… hoy solo me ha traído problemas: primero mi hermana, después Teo… ¿Será el siguiente Sawn? Miro mi camiseta azul eléctrico de tirantes, vale, es algo ajustada pero…tampoco es para tanto ¿no? Y no les veo nada malo a mis shorts blancos…</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Nada. Es raro verte así… –se sonroja- pero estás muy guapa.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Al último chico que me ha dicho esto le he hecho una llave.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Se sonroja aún más. No sé si es posible que la piel de alguien adquiera un tono rojo tirando a burdeos.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Lo-lo siento.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-¡¡No lo sientas!! ¿Ves? Es este tipo de actitud lo que hace que tus padres…</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-¡Has dicho que mañana!</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Me muerdo el labio, y cambio de tema.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Bueno, vale. Mira que bonitas están las estrellas.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Es cierto, un montón de puntitos blancos sobre un fondo negro nos hacen de techo. Increíble.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Sí, son preciosas…me gustaría dibujarlas…</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-¿Y porque no lo haces? En la estación de tren hay un buen sitio… además, me encantaría verlo siempre que quedamos con los chicos. Imagínatelo. Un refresco en la mano derecha, y mirando las estrellas que tú has pintado… ¡seria genial! –no responde.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Veeeeengaaaaa… -añado en tono de súplica.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Ok, mañana lo hago.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Vale.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Oh. Mierda ¡He vuelto a caer! Y lo peor es que yo misma le he proporcionado la excusa. Chuto enfadada una piedra, que choca con… algo, provocando un ruido metálico.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-¿Qué ha sido eso?</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Ni idea Sawn.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-¿Quieres mirarlo?</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Por mi bien.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Nos acercamos al lugar donde he chutado la piedra y vemos una tubería.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-¿Y esto que hace aquí?</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Se encoje de hombros.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-En serio, no sabía que había algo por aquí, porque la tubería tiene que llevar a algún lado, digo yo.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Sí… pero paso mucho por aquí y nunca he visto ningún edificio.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Yo tampoco… Oye ¿Qué te parece si lo buscamos? El lugar a donde vaya esto –y le pego una patada al tubo metálico.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-A mi no me importa Tammy, además, será interesante…</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-¡¡¡Pues ale, vamos allá!!!</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Seguimos avanzando entre la hierba, mirando la tubería con tal de no perder el rumbo. Un rato más tarde, algo me tapa la luz de las estrellas, miro hacia arriba, y ahogo un gritito.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Estoy SEGURA de que eso no estaba aquí antes.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Sawn sube la cabeza, y tan solo se le ocurre decir:</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-¡¡¡¡¡¡¡¡WOW!!!!!!!!</span></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjCPByoq-Ar_0mIeB2IrqRzMBVQmjBOrLaMqOzmmNu-UNMcSjQ9RAxfiIPFfHwhtBGiF2_s-225ZEl8WOENXVavAfmON1blyM1pn-hT5sGPxfBMk0ixbnNVJF_cuk86lZFKwU4aQMM5JEU/s1600/casa+hist+retocada.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><span style="color: #134f5c; font-family: inherit;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjCPByoq-Ar_0mIeB2IrqRzMBVQmjBOrLaMqOzmmNu-UNMcSjQ9RAxfiIPFfHwhtBGiF2_s-225ZEl8WOENXVavAfmON1blyM1pn-hT5sGPxfBMk0ixbnNVJF_cuk86lZFKwU4aQMM5JEU/s320/casa+hist+retocada.jpg" width="275" /></span></a></div><div style="font-size: 14px; line-height: 20px; margin-bottom: 16px; margin-top: 8px; padding-bottom: 0px; padding-left: 0px; padding-right: 0px; padding-top: 0px; text-align: left;"><span style="color: #134f5c; font-family: inherit;"><br />
</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Ante nosotros se impone una casa antigua, de piedra gris, puertas y ventanas de madera oscura…y podrida, compruebo enseguida, la mayoría de ventanas no tiene cristal, o lo tiene roto. Es enorme, más que el instituto, y también más intimidante…lo cual ya es decir. El tejado a dos aguas está cubierto por unas pocas tejas sucias y un increíble número de cagadas de pájaro. Me acerco a una valla, aún más oxidada que la tubería que nos ha llevado hasta allí, entre barrote y barrote, solo veo telarañas. Tan solo hace falta un empujón para que se abra con un chirrido típico de una película de terror. El jardín no hace más que aumentar la sensación de estar metida en un libro de Stephen King, varios árboles muertos, completamente desojados alzan sus ramas, retorcidas, de forma tétrica. Y la única vida vegetal de por allí consiste en arbustos, ortigas y malas hierbas. Un escalofrío recorre mi espalda.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Esto es… increíble.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Y que lo digas… sería genial dibujarlo.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Ese es Sawn, ninguna otra persona estaría aquí, tan tranquilo, pensando en cómo quedaría mejor el sombreado cuando lo dibujase. Tal es mi alucine, que apenas oigo las voces de un chico y una chica acercándose. Me giro, rápidamente, para ver a Nathan y Rossana acercándose.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Llegan hacia la puerta, que creo, en su tiempo fue la entrada principal. Se giran hacia nosotros, y nos miramos.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Hola –Sawn no parece muy animado a decir nada más, aunque vamos a menudo con Nathan, no suelen hablar.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Hey –Nathan esta sonrojado, no sé que le habrá dicho Rossana.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Eeeeeh… hola –La chica parece pensativa.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-¿Qué hacéis aquí? –No me corto al decirlo.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Rossana contesta:</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Nosotros podríamos haceros la misma pregunta… porque dudo que viváis aquí.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Touché –Sawn ha vuelto a la realidad.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Vale… puede que sea yo, pero nunca había visto esta casa. Por favor, decidme que siempre ha estado aquí –Nathan cambia el tema en seguida, como siempre, intenta evitar las discusiones que ve a su alrededor (y eso tiene mérito con “nuestro grupo”).</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">No veo ningún problema en complacerle:</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Siempre ha estado aquí.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Me mira, esperanzado:</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-¿En serio?</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-No, pero si quieres pensar que sí, por mí no hay problema.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Baja la cabeza, y susurra una maldición.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Rossana le pone la mano sobre el hombro, pero lo hace con duda, como cuando llevas la porcelana favorita de tu madre de un lado a otro, y sabes que si la tiras te matará.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Mira el lado bueno: no estás loco –Lo dice con una sonrisa, pero le tiembla un poco la voz.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Sawn rie:</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Bueno, si esto es una alucinación colectiva, quiero dibujarla. ¿Entramos?</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Esta nervioso, pero nervioso en el buen sentido, como antes de un concierto o algo así. No puedo evitar soltar una carcajada:</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Sí, no creo que vaya a haber un fantasma ahí dentro.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Rossana dice algo en italiano que suena a “cosa que una señorita respetable y pija no debería decir” y chasquea los dedos ante nosotros:</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-¿Estáis locos? Esa cosa –señala la casa- está a punto de derrumbarse.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Bueno, pues por eso, mujer ¡tendremos que entrar antes de que se derrumbe!</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Nathan se tapa los ojos con la mano, y repite sin cesar:</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Ohdiosmioohdiosmioohdiosmioohdiosmioohdiosmio –pausa para respirar- ohdiosmiooh…</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-No me puedo creer que estemos a punto de entrar ahí.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-¿Estemos? Pero si estamos locos y “esa cosa” se cae a trozos, según tú.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Ya, bueno, pues creo que yo también estoy loca. Total, cuando llegue a casa me van matar igual, con excursión a casa encantada incluida o no.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Me pongo de puntillas para agarrar la argolla (que, supongo, en un pasado fue dorada), y golpeo la puerta con ella. Suena una especie de eco, repitiendo el sonido grave que produzco al chocar de nuevo la argolla con la puerta, no puedo evitar pensar en el sonido que produce el martillo de un juez (como en las pelis) al golpear la mesa.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Vas a ver tú, que si estará encantada y todo… -Nathan se acerca un poco más.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-¡Venga hombre! ¡Ven con nosotros! No me seas cagueta…</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Lo he puesto en un aprieto de cuidado, delante de Rossana… (se nota muchísimo que está por ella desde hace años, pero parece ser que la chica tiene problemas graves de vista o algo)</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-¡Claro que voy a entrar! Pero si pasa algo nos largamos.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-¿Qué va a pasar? ¿Nos saldrá un fantasma cuando atravesemos el vestíbulo?-Tampoco es cuestión de avergonzarlo tanto al pobre, así que, para rebajar el ambiente, y evitarle contestar, suelto una carcajada amistosa.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Sawn ha decidido pasar de nosotros y está intentando empujar la puerta con el hombro. Me aproximo, y le ayudo. Nathan no tarda en acercarse a nosotros, y animamos a Rossana para que venga. Ella suelta un suspiro y dice con dramatismo:</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Adiós querida manicura. Han sido unas buenas dos horas.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Y con las manos se junta a Nathan (este se pone colorado en seguida), y añade esa poca presión que nos faltaba para abrir la pesada puerta.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Curiosamente, ocurre justo al contrario que con la verja, la puerta no produce ningún ruido al abrirse, lo que, no sé porque, contribuye a ponerme más nerviosa. Lo único que ocurre, es que levantamos una nube de polvo similar a una tormenta de arena. Me pongo a toser, tapándome la boca con u mano, y restregándome los ojos con la otra. Una vez puedo ver y respirar con normalidad, me giro en el sitio, y contemplo la sala que nos rodea.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">No es un vestíbulo, como me esperaba, si no una especie de salón. Voy hacia los sofás raídos, de los que sale el relleno, como de oso de peluche, cubiertos de polvo, igual que la sala entera (la casa entera, me atrevería a decir, ahora que he visto las escaleras). Tanto hace que nadie le ha pasado una escoba por el suelo, que dejo mis huellas en el. Ahora que me he acercado a uno de los sofás, veo una mesita baja, que me llega más o menos a las rodillas, con el borde de lo que creo que es madera oscura, y el centro de lo que debería ser cristal, pero no es nada, puesto que está roto. Al fijarme mejor, veo pequeñas esquirlas de cristal, así que aviso a los demás de que tengan cuidado.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Una vez explorados todos los recovecos de la sala, decidimos subir las escaleras. Unas barandillas de madera oscura, que parece tan segura como la que hay fuera, con restos de lo que, en su día, fueron elegantes grabados, me fijo un poco más y consigo ver lo que queda de unos relieves de formas confusas, están allí para evitar que no caigamos (que no sé que van a evitar, pero bueno).</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">El techo está lleno de telarañas, finas, tanto que algunas ni siquiera las veo, hasta que las noto en el brazo, o la ropa. Para evitar encontrarlas en el pelo, recojo los largos mechones lisos de color chocolate con leche en una trenza de espiga al costado, tengo bastante práctica, así que puedo hacerlo sin parar mi ascensión. Hemos llegado, y aquí arriba no vemos nada de nada, está oscuro como boca de lobo. Por alguna extraña razón, Sawn lleva una linterna de esas que funcionan con manivela encima (a saber para qué, si se suponía que íbamos de fiesta), así que podemos seguir explorando.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-¡Esta casa debe tener muchísimos años! –Nathan parece admirado porque haya conseguido sobrevivir tanto tiempo.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Los tiene –Me limito a contestar- si te fijas en los detalles, como esas barandillas de antes, puedes comprobarlo.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-¿Te fijas en las barandillas, en plena excursión a una casa que parece fantasmal? –Parece que Sawn está conteniendo la risa, aunque no le veo la cara.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-¿Y tú que hablas? ¿Acaso no has entrado solo para observar sombreados? –Contesto con sarcasmo.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-¿Por qué habláis en susurros? ¡Ni que se fuera a despertar un vecino! –No me había dado cuenta hasta que ella lo ha dicho, pero es cierto, hemos hablado en un tono bajísimo todo el rato.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Supongo que por el ambiente.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Seguimos caminando en silencio un rato, pero de repente la linterna de Sawn se apaga.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Lo sient…</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">No llega a acabar de disculparse, puesto que el grito de Rossana lo interrumpe a mitad.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAH!!!!!!!!!!!!!!</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Y justo después oímos “Plof”. Se la ha pegado.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Lo siento Nathan ¿te has hecho daño?</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-¿Qué? Yo no me caído.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Imposible, ¿entonces…quien está debajo de mí?</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Yo no –Contesto.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Eeeem… yo tampoco…</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">-Pues ¡Hay ALGUIEN debajo de mí!</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">Sawn nos ilumina con la linterna, que, tras darle unas cuantas vueltas a la manivela, funciona de nuevo. La primera en ver lo que hay debajo de Rossana, es ella misma.</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">- ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAH!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">- ¡NO PUEDE SER!</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">- ¿Quién me mandaba a mí meterme en este lio?</span><br />
<span style="color: #134f5c; font-family: inherit;">- Joder.</span></div>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-3489768971605707305.post-8279755817214461872012-02-02T05:02:00.000-08:002012-02-02T05:02:43.957-08:00Somewhere over the death. Segunda parte.Ya está!!! Hecha por Marina:<br />
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Miré mi reflejo en el espejo, los vaqueros pitillo marcaban mis delgadas pero largas piernas, una camisa azul marino ocupaba mi torso, y en los pies, unas Vans del mismo color hacia resaltar el azul de mis ojos, que brillaban con una chispa de emoción, me aparté un mechón de pelo de la frente y bajé al comedor.<br />
Las sillas estaban en perfecto orden alrededor de la mesa, los platos estaban en su sitio, la tele, apagada, con todos los mandos dispuestos en un perfecto orden de tamaño. Suspiré, mi familia siempre había sido maniática del orden, abrí la pesada puerta marrón y la cerré tras haber salido.<br />
¨Acuérdate cariño, antes de las 12:00 en casa¨<br />
Las palabras de mi madre retumbaban en mi cabeza, quien iba a pensar que yo, Nathan, uno de los chicos menos populares había sido invitado a la fiesta del siglo. Pero, mas tarde lo pensé mejor, todo el mundo había sido invitado. En realidad, yo en esa fiesta no pintaba nada, ni siquiera quería ir, pero todo el instituto iría, y si yo no lo hacía…no quería saber cuales serian las consecuencias. Mis pies caminaban hacia la casa de donde provenía la música, incluso a varias manzanas se oía el jaleo.<br />
Cuando llegué, varias carpas estaban montadas en el jardín de la enorme casa, me giré, como no, la P-C, estaba a rebosar de gente, la música me hacia daño en los oídos, pero a los minutos me acabe acostumbrando.<br />
Me acerqué a empujones a la mesa de bebida, y me serví un poco de ponche.<br />
-¿En serio lo quieres beber? Estoy seguro de que tiene medio litro de vodka.<br />
Volví la cabeza, Kye, uno de mis mejores amigos me sonreía desde lo alto que era, antes de saludarle deje el vaso en la mesa, con la esperanza de que eso no tocara mis labios.<br />
-¿Desde cuando llevas aquí? Le pregunté.<br />
-Desde que esto empezó.<br />
-¿Y?<br />
-Bah, no he visto a tu amiga Tamara por aquí, pero no me hagas mucho caso, esto se ha llenado de gente en menos que canta un gallo, lo que sí sé, es que las ¨populares¨ han llamado la atención mas de una vez…<br />
Se corto y acerco su boca a mi oído.<br />
-Y la mitad están borrachas.<br />
No pude contener una risita, estaba seguro de que no eran las únicas que no estaban sobrias. La gente de mí alrededor se tambaleaba como si el mundo diera vueltas mas rápido de lo que lo hacía.<br />
-Bueno, voy a dar una vuelta Kye.<br />
Y efectivamente, estaba en lo cierto, una chica me persiguió durante media hora preguntándome si quería cerveza, otra, me confundió con Zac Efron (¿¡Que tengo yo de Zac Efron!?) y un chico casi me da un morreo, pensando que era su novia.<br />
Cuando llegué al centro de la carpa P-C, pude diferenciar a Sandra bailando con la gente a su alrededor, no pude evitar marcar el ritmo de la música con los pies, hasta que mi cuerpo empezó a moverse.<br />
Miré el reloj, ya eran las 12:00, el tiempo se me había pasado volando, y desgraciadamente no había podido hablar con Tamara, caminando como pude entre la gente, llegue hasta Kye, me despedí de él y me fui de aquella locura.<br />
Estaba caminando por la acera, con las manos en los bolsillos y sumido en mis pensamientos, cuando un escarabajo verde familiar paso a mi derecha. Me giré, era mi hermano mayor, Lain, me mando una sonrisa cómplice y me dijo:<br />
-¿Te llevo?<br />
Rodee el coche y entre por la puerta del copiloto, el coche arrancó y fue calle abajo.<br />
-¿Qué tal la fiesta?<br />
Miré a mi hermano.<br />
-Normal.<br />
-¿Normal? Por favor Nathan, que soso eres. ¿Ninguna chica?<br />
Suspiré, no iba a contarle lo de Rossana.<br />
-No Lain -Mentí-<br />
Mi hermano resopló.<br />
-Yo a tu edad tenía una cola de chicas detrás de mí.<br />
Los ojos azules de mi hermano brillaron.<br />
-¿Y?<br />
-Que tú nunca triunfarás hermano.<br />
Antes de poder reprocharle nada oí los gritos de una chica, me giré, veía una cosa borrosa, guiñé los ojos con la esperanza de ver algo mejor, era… ¿Rossana? Un pequeño cosquilleo empezó a habitar en mi barriga, ¿Qué pasaba?<br />
-Lain para.<br />
Rossana se acercó corriendo al coche, y al verme se sorprendió.<br />
-Yo…lo siento, creía que se trataba de otra persona.<br />
Miré a mi hermano, los ojos se le encendieron.<br />
-¿Quieres venir? ¡Tranquila! ¡Yo voy a patita!<br />
Disimuladamente le mandé un pisotón a mi hermano.<br />
-Además, Nathan esta aprendiendo a conducir, bueno, ya casi sabe mejor que yo.<br />
-No de verdad –respondió ella- no hace falta.<br />
Pero mi hermano con lo cabezón que era y con mi plan de futuro, no iba a dejarse concienciar.<br />
-¡Sube, sube!<br />
Ni siquiera le dio tiempo a la pobre Rossana de recapacitar porque la metió en el coche directamente, me tapé los ojos con las manos mientras mi hermano me arrastraba hasta el asiento del conductor, no sin antes decirme que aprovechara.<br />
Cuando mi hermano se alejó, puse la mano en el contacto por un acto reflejo,pero la aleje tras pensármelo mejor, durante varios segundos, el coche se quedo sumido en el silencio, Rossana tenía la vista fija en el dobladillo de su vestido, al parecer, bastante interesante.<br />
-Rossana, si es que…<br />
-¿No sabes conducir verdad?<br />
-Exacto…<br />
Rossana soltó un pequeño resoplido.<br />
-Si quieres -continúe- te acompaño.<br />
Rossana me miro.<br />
-Bueno, a caballo regalado, no le mires el diente, pero tengo prisa, puede que me descuarticen si no llego a tiempo.<br />
Salimos del coche, lo cerré con llave y camine junto a Rossana a paso ligero por la acera.<br />
-¿Porque alguien que se sale del molde lo tacháis de ”ratito”?<br />
Desde que las palabras salieron de mi boca me arrepentí de haberlas dicho.<br />
Rossana me miro como si no supiera de lo que estaba hablando.<br />
-¡Si ya sabes! Si no es popular, atlético, o rico, ¡No le hacéis caso! Sin siquiera conocerlo…<br />
Rossana me miro enfadada:<br />
-Eso no es verdad.<br />
-¿Seguro? ¿Has intentado conocerme?<br />
Rossana negó con la cabeza.<br />
- ¿Y cuantos años llevo compartiendo clase contigo? <br />
De nuevo Rossana negó con la cabeza.<br />
-¡Toda mi vida!<br />
Empecé a relajarme, había soltado todo lo que hacia falta, ahora faltaba disculparme.<br />
-Yo… ¡Oh lo siento!<br />
Rossana se quedo callada, yo agache la cabeza ¿¡Quien me mandaba a mi a decir lo que pensaba!?<br />
Cuando giramos la calle (en silencio) un clima extraño nos rodeo, el ambiente se volvió oscuro y frío, dando paso a un miedo desesperante.<br />
-¿Que pasa? Me pregunto Rossana mientras le castañeaban los dientes.<br />
No le respondí, me limite a mirar en la lejanía, una casa, de aspecto muy siniestro, pintada con un liquido negro que se estaba cayendo, telarañas y de aspecto muy descuidado se alzaba a unos metros de nosotros.<br />
-¿Esa casa…-intente coger aire,costaba respirar- estaba antes?<br />
Rossana no me contesto, pero yo ya sabia la respuesta.<br />
Ahora, estamos plantados frente a la puerta, con la horrible (y sinceramente, algo siniestra) idea de entrar en el terrorífico hogar, pero he de decir, que no estamos solos, Sawn y Tamara (para mi sorpresa) están a nuestro lado.Unknownnoreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-3489768971605707305.post-37774645693915864392012-01-28T11:48:00.000-08:002012-01-28T11:48:27.264-08:00Somewhere over the death. Primera partePrimera parte hecha por Cotic:<br />
<br />
ROSSANA<br />
Noto algo duro, y frio, si, muy frio. Intento taparme con la funda nórdica, pero mis brazos no notan nada más que el lugar duro y frío donde estoy apoyada, extraño, no recordaba así mi cama, decido que, si quiero dejar de temblar, debo abrir los ojos para encontrar mi cálida funda y taparme con ella. En cuanto abro los ojos, entiendo porque no se parecía a mi cama, sencillamente, porque no es mi cama, estoy tumbada en el suelo, temblando. Me arrodillo, y cuando mis ojos llegan a la altura del despertador, los números no me sorprenden «Otra vez me despierto a las 5 de la madrugada, para variar», me tumbo en mi cama, y como de costumbre ya, empiezo a intentar pensar en el sueño que he tenido, y como de costumbre, no lo consigo. Es una sensación molesta, estoy segura de que he soñado (no tengo una razón lógica, pero lo sé), pero nunca consigo recordar que sueño. Vuelvo a mirar mi reloj 05:32 ¿Ya ha pasado media hora? «Será mejor que duerma, o me dormiré en clase otra vez», aproximadamente quince minutos más tarde, tras muchas vueltas en la cama, consigo adormilarme.<br />
Mi reloj suena, «¿Ya? Pero si tan solo hace unos minutos que me dormido», miro por segunda vez en unas horas la hora, 07:00, me desperezo como un gato, y me quito el pijama largo que llevo «Suerte que lo retro se ha puesto de moda», me estremezco al imaginarme en una fiesta de pijamas con Maddy, Rachel y Sandra ¿Qué pensarían de este conjunto hace tan solo un par de años? Lo miro con aire crítico, un conjunto azul cielo, con el cuello como si fuera de camisa (pero más cómodo) estampado con puntitos negros, al igual que el dobladillo de las mangas y el pantalón (largo, aunque tenía un conjunto exactamente igual para verano en rosa claro); el resto del pijama es del mismo color, pero estampado con unas rayas verticales. En ropa interior (woman’s secret), me envuelvo con una toalla negra, a rallas fucsia. Agarro la ropa que elegí ayer para hoy (vaqueros bsk oscuros, camiseta pull and bear negra con letras llamativas de colores verde lima, naranja, rojo, rosa, y azul pavo real, cazadora vaquera, y ropa íntima, por supuesto, todo cuidadosamente escogido, incluidos los calcetines), perfectamente plegada y ordenada. Voy al baño conjunto a mi habitación (es una de las cosas buenas de ser hija única), solo para mí. Me acerco a la bañera, y empiezo a calentar el agua para ducharme. Y mientras corre, empiezo a separara los diferentes champús, geles, suavizantes, mascarillas acondicionadoras, lociones, aceites y cremas, por orden según me lo valla poniendo. Acerco mi toalla para tenerla a mano en cuanto salga. Cambio mis zapatillas de ir por casa (Hello Kitty), por mis chanclas. En la ducha, vuelvo a pensar en el sueño que tengo cada noche, a ver si consigo que venga a mi cabeza algún fragmento. Cuando salgo, lo único que tengo, es un considerable enfado contra Dios, Morfeo, Destino o el mundo en general, no por no revelarme este fastidioso sueño, sino por desvelarme por las noches para algo así de inútil. Mientras despotricaba me he ido vistiendo, y ahora tiro la ropa sucia a su cesto. Mientras me desenredo el pelo, miro el reloj (también de Hello Kitty), 07:50 « ¡Oh! Ya ni siquiera me da tiempo de alisarme el pelo ». Decido, al menos, secármelo bien. Así lo hago, para que mi pelo, que parece estar constantemente teñido por henna, ese tinte natural, coja la forma unos rizos amplios, que, de alguna forma, coloco para que me caiga sobre los hombros y por la espalda, sin que me tape la cara. Tengo al piel pálida, y no puedo enmendar eso de ninguna manera, me he pasado veranos enteros apostada en la playa, y he probado tantos bronceadores artificiales, que las chicas de la tienda de productos corporales, colonias y maquillaje, me ofrecen nuevas marcas antes de que acabe de cruzar la puerta y decir siquiera que es lo que quiero. La verdad es que me miran como si mi piel fuera un reto personal. Bueno, eso no hace más que destacar las ojeras que tengo desde hace ya un tiempo, enmarcan mis ojos oscuros, tan oscuros, que al marrón del centro cuesta distinguirlo de la pupila. Cojo una diadema vieja, y me retiro el flequillo hacia atrás. Empiezo a pasarme las toallitas anti-granos y espinillas, una vez desaparece el líquido en mi cara, me pinto la ralla inferior, depilo un poco mis cejas, y las perfilo con las pinzas. Mis ojos han cambiado radicalmente, como era de esperar, a mis mejillas les aplico tan solo un poco de colorete líquido, que da un aspecto de sonrojado permanente y le da un toque dulce a mi rostro, contrarrestando un poco el aspecto de la raya, tan duro. Me pongo un poco que gloss de sabor dulce, que le da a mis ojos una apariencia más carnosa y brillante. Me asomo de nuevo. Las 08:04. Retiro la diadema de mi cara, y dejo que el flequillo caiga sobre mi frente. Alzo las manos y me miro las uñas, decoradas con manicura francesa del salón de manicura “Madame elegance”. Me siento orgullosa de mi aspecto, la verdad.<br />
Me falta un cuarto de hora aproximado para salir de casa. Aprovecharé para desayunar. Leche de soja y un par de galletas bajas en calorías, mi constitución es de esas que no engordan, desde luego si crezco, crezco de alto, pero de ancho no, pero, aún así, cuidarme un poco no me matará. Además “mujer precavida vale por dos” ¿Qué pasaría si de pronto empezaba a engordar sin motivo alguno? Bueno, dudo que pasara, pero…por si acaso, otra de las razones de que me cuidara de esto, es que he visto a mi prima, la mezcla de una ballena y un tiranosaurio rex. Puede que quede mal por mi parte decirlo, pero cada vez que voy a Italia, parece que se haya comido a dos niños. La verdad sea dicha, no es por su aspecto que tengo mala opinión de ella, es porque es una abusona: un día la vi persiguiendo a unos niño de 7 años con la bici, asustándolos, solo porque se aburría. Afortunadamente, cuando se giró para sacarme la lengua y decirme que yo no mandaba sobre ella y rollos de los suyos, se me “olvidó” decirle que iba directa contra una farola. Le pusieron hierros a las dos semanas, ¡oh! ¡Que dos semanas! Durante todo el verano no hizo otra trastada más, pero estoy segura que cuando mi avión despegó, volvió a las andadas…<br />
Mamá interrumpe mi flaixback, para hacerme subir al coche. Nos vamos, yo a mi escuela, y ella a no sé qué cosa de abogados. Lleva un moño no muy rígido, recogido en la nuca. Su vestuario es parecido al de siempre, vaqueros y blusa blanca, con chaqueta de tela. Sus ojos son un poco más claros que los míos, como puedo apreciar por el retrovisor claramente. Aprovecho para entablar conversación, porque es una de las pocas veces del día en que podemos hablar.<br />
-Mmmm… ¿Cómo va el caso ese de… -pienso cual es el último caso del cual se quejó- derechos de autor?<br />
-Hace ya tiempo que mi cliente ganó el caso, y el otro le ha pagado una cantidad…satisfactoria.<br />
Lo dice como si hiciera años que ganó el caso, y me lo dijo la semana pasada. Bueno, intento buscar otro tema.<br />
-Tienes el moño un poco desecho.<br />
Es cierto, al apoyarse en el respaldo del coche, se le ha aplastado y un par de mechones le han saltado de la goma. Mira por el retrovisor con ojo crítico, y decide que tengo razón, porque, cuando me inclino hacia ella para solucionarlo, sonríe, agradecida.<br />
-Espera un segundo Rossana, que está la policía allí, y como te vea…<br />
Vuelvo a mi posición, asintiendo. Cuando pasamos a los polis, me inclino de nuevo, y continúo con mi labor. Estar en el asiento trasero ayuda bastante (el asiento del copiloto está lleno de carpetas y papeles). Cuando acabo, saco una horquilla más de mi bolsillo (siempre llevo un par, por si acaso) y le acabo de arreglar el peinado. Estamos llegando, no se me puede pasar la oportunidad.<br />
-¿Rossana, llevas el inhalador?<br />
Suspiro, otra vez el mismo tema.<br />
-Sí, claro, siempre lo llevo. Aunque no entiendo porque, hace años que no me da un ataque, incluso puedo hacer deporte.<br />
-Lo llevas…<br />
-…Por si acaso pasase algo -decimos a coro.<br />
-Ya, bueno, pero es que este inhalador –el último cayó “accidentalmente” bajo un coche, y mi madre se apresuró a comprar uno nuevo- ni siquiera lo he tocado, porque no me ha hecho falta, y hace dos años que lo tengo.<br />
-Me da igual, lo llevarás encima, que no te cuesta nada.<br />
Hago un mohín, pero lo dejo correr, es una batalla perdida. Y, ahora sí, saco el tema que me interesa.<br />
-Mamá…esta noche habrá una fiesta…bueno, no es una fiesta fiesta –digo, al ver su expresión- es…más como…una…feria para adolescentes -«Que acabará con la mejor fiesta del año, y no me puedo perder», pero me “olvido” de comentarle esto a mi madre.<br />
-¿A qué hora?<br />
-Empieza a las nueve, y acaba sobre las once -«O las doce, o la una…» bah, si, total, de lunes a martes…<br />
-¿Dónde?<br />
-Por… el barrio de la casa de Maddy.<br />
-¡Eso está lejísimos de aquí!<br />
Maddy vive en una urbanización, por el norte del pueblo.<br />
-Tranquila, me traen de vuelta en coche.<br />
-¿Quién? ¿Crees que voy a dejar que te subas en el coche de un desconocido?<br />
-No es un desconocido…es el novio de Maddy.<br />
-Ah! Comprendo, entonces de acuerdo, pero no te separes de ellos.<br />
-¡Claro que no!- contesté, con mi tono más escandalizado posible.<br />
Otra cosa que se me había pasado decirle a Mamá era que Maddy cambiaba de novio cada semana, más o menos, y que hace ya un tiempo que dejó a Robert. Robert era un novio de Maddy que iba a bachillerato, muy responsable, pero Maddy lo calificó de “aburrido” un par de días más tarde de presentárselo a mi madre, ahora va con Pablo, un chico de 4º, con carnet de conducir, que no se parece en nada al otro. Si, se podría escribir un libro de las cosas que no les cuento a mis padres.<br />
Hemos llegado. La inmensa construcción de hormigón que es mi instituto, se impone ante mí, tan aburrida como siempre. Sin embargo, aún no es hora de entrar, en los diez minutos que quedan, me propongo hablar con mis amigas de la buena noticia. Solo me falta encontrarlas entre la marea de gente que espera a salir de clase, cuando todavía no ha entrado. ¡Ya las veo!<br />
-¡Rachel, Sandra, Maddy! –Grito sus nombres para que me presten atención.<br />
Lo consigo, se giran hacia mí, y me saludan con la mano, y una sonrisa en la cara.<br />
-Hey Roxie.<br />
Dirijo a Rachel una mirada furibunda. Odio que me llamen Roxie, me recuerda a nombre de una niña mimada americana, con un bolsito rosa, chihuahua incluido.<br />
-¡No me mires así! Es tu diminutivo. Tu nombre es Roxanne, así que el apodo…es obvio ¿no?<br />
Rachel insiste en poner un mote a todas las personas que conoce. A veces me pone de los nervios.<br />
-Ya te lo he explicado mil veces. Me llamo Rossana! Ro-ssa-na.<br />
-¡Es lo mismo, pero en otro idioma!<br />
-Vamos chicas, ya habéis tenido esta discusión antes. –Sandra intenta poner paz.<br />
-¡Sí sí! Quedamos en que podías llamarla Rossie, y ya. Rossana, se te veía muy contenta ¿algo nuevo? –Pregunta Maddy con una sonrisa.<br />
Olvido el enfado para contarles como he conseguido la aprobación de mi madre.<br />
Cuando acabo con lo del novio, las chicas se parten la caja.<br />
-¡Qué bueno! ¿En serio?<br />
Asiento, con una sonrisa.<br />
-Guau! Esta noche vamos a arrasar.- asegura Rachel.<br />
-¿Esta noche? Cari, yo siempre arraso – puede parecer que Maddy se da aires, pero, realmente es encantadora, lo chicos van hacia ella como miel hacia las moscas, bueno, para ser justos, todas tenemos una avalancha de chicos mirándonos embobados en cuanto nos giramos.<br />
Rachel se mira en el espejito que acaba de sacar de su bolso. Realmente sabe sacarle todo el partido a su piel bronceada, ojos miel, pelo rubio, liso y voluminoso, y su figura curvilínea hace que le queden bien cosas que nosotras solo podríamos soñar con llevar. Un vestido por la rodilla, con escote generoso, y estampado otoñal, con unos botines marrones de tres dedos de tacón, forman su vestuario de hoy. El pelo suelto, lo lleva adornado con una especie de pinza plateada con forma de hoja de otoño, a juego con el vestido. Mira de reojo a su novio, el capitán del equipo de futbol, y, con gracia y descaro, le guiña el ojo. Él alza las cejas, y le hace un gesto para que se acerque. Con otro gesto, Rachel le responde que después.<br />
-Puedes irte con él si quieres, tranquila –Le indico.<br />
-No, que se espere.<br />
-Pobrecito. –Sandra mete cucharada en la conversa.<br />
-¿Si me voy no me echareis de menos?<br />
-Seguro que menos que él –Añade Maddy con un amago de sonrisa.<br />
-Bah, dejad que espere su turno, que no le hará ningún mal.<br />
Reímos un poco, aunque sea cruel, es el pan de cada día.<br />
Maddy se cepilla el pelo moreno, y coge una diadema con un lacito, blanca.<br />
-¿De dónde es? –Pregunto, señalándola.<br />
-Claire’s<br />
Me lo esperaba, pues Maddy es una fan de esa tienda de accesorios en particular, pero habría parecido maleducada si no lo preguntaba (era nueva). Mi amiga aprovecha al máximo su pelo moreno, rizado y corto, y sus formas generosas. Los ojos son increíbles, de un color azul oscuro, y sus pestañas, largas, negras y rizadas, los agrandan, una cosa que encanta a todos sus fans (sí, tiene club de fans propio), son sus labios (y vaya si sabe usarlos…), normalmente pintados de un tono entre fucsia y cereza, precioso. Como siempre, lleva unos vaqueros negros, con un cinturoncito, y la camiseta es preciosa, larga, blanca, con un leopardo dorado corriendo tras una gacela, y una inscripción que reza “catch me, please”, con manchitas, imitando la piel del felino. Maddy es más bien bajita, pero lo disimula muy bien, ya que siempre lleva unos tacones que la hacen parecer casi un palmo más alta de lo que es. Hoy, por ejemplo, se ha puesto unas botas altas, de poco tacón, aparentemente claro, porque por dentro, seguro que esas botas llevan al menos, dos dedos más de tacón.<br />
-Oye, Maddy… estaba pensando… ¿a qué hora acaba la fiesta?<br />
-No sé… sobre las dos, supongo.<br />
-¡¿Las dos?! ¡Mi madre llega a las doce a casa!<br />
-¿Y qué? ¿No has dicho que te ha dejado ir?<br />
-Sí, bueno, le he dicho que acababa sobre las once…<br />
-¿Sobre las once? ¿Pero que se cree que somos, niñas de parvulario?<br />
-¡Sí! Pero pensaba llegar sobre las doce menos cuarto o así, y fingir que llevaba un rato dormida.<br />
-¡La otra! ¿Las doce menos cuarto? Va a ser la mejor fiesta del año ¿y te preocupas por la hora? Rossie, no hay quien te entienda.<br />
-Sí, bueno, pero el mal ya está hecho.<br />
-Bueno, da igual, te devolvemos a casa a menos cuarto, y ya te contaremos que tal ha ido.<br />
-Tranquila, seguro que no te pierdes gran cosa… -Sandra intenta consolarme.<br />
-¡Ya, claro! ¿Qué parte de “la mejor fiesta del año” no entiendes? –Y Rachel hunde las pocas esperanzas que me quedaban, fantástico. Maddy y Sadra, se encargan de fulminarla con la mirada para que cierre la boca. Lo haría yo misma, pero estoy demasiado deprimida para eso.<br />
-Bueno, al menos, seguro que deslumbras a todos con ese vestidito que te compraste, en el rato que estés. Tú dedícate a ponerte guapa, que nosotras a las diez, te recogemos. –Maddy intenta arreglarlo.<br />
-Sí, sí, claro. No hay problema.<br />
Pasamos el resto del día aburridas (Sandra va a la línea C, Rachel a la A, y Mady y yo vamos a la B, pero nos sentamos muy alejadas. Así que estamos completamente incomunicadas en clase, solo nos juntamos para educación física y optativa), hasta la hora del patio, donde hablamos del nuevo vestido de Sandra para esta noche. Sandra es africana, su piel color chocolate es preciosa. Alta, sin curvas, barriga ni nada parecido, se puede poner los conjuntos más ceñidos existentes, y conseguir que le queden bien. Su pelo es largo, negro y liso, y por el costado izquierdo, hacia la parte del flequillo (que lleva siempre retirado hacía un costado, con un mechón suelto), una mecha roja como las rosas que recibe por San Valentín, brilla, cosa que llama la atención de más de uno. Sus ojos son completamente negros, y pueden intimidar un tiempo, hasta que te acostumbras. Nunca lleva pintalabios de ningún color, siempre lleva brillo. Es una autentica fan de la purpurina. Cuando va de fiesta (como esta noche), se pone un poco en lugares estratégicos, los ojos, los pómulos, y, por supuesto, los labios, de forma que cuando los focos la iluminan, parece que destellan. Pero no al estilo “cría de cinco años que juega con la purpurina de las muñecas y acaba pareciendo un árbol de navidad”, si no al estilo “soy deslumbrante y esto lo potencia”. Hoy lleva cazadora vaquera (a causa de la cual no le puedo ver la camiseta), y minifalda, también vaquera, de botones dorados, con una cadenita (dorada) que cruza des de el bolsillo delantero hasta el trasero. Sus zapatos son preciosos, dos dedos de tacón, muy elegantes, peep-toe, con estampado vaquero. Sí, Sandra tiene una obsesión con todo lo vaquero.<br />
Una vez vuelvo a casa y acabo de comer, pienso en mi aspecto. Vuelvo a hidratarme, y cojo el vestido que compré el otro día con las chicas. Es precioso, un vestido negro, corto (por encima de las rodillas, pero no mucho más arriba) palabra de honor, descubierto en parte por la espalda, y por bajo, hace formas vaporosas. Mis zapatos son una especie de francesitas pero con tacón. Decido dejar mi pelo rizado recogido en una especie de moño, elegante, y que, cuando se deshaga, quedara muy…divertido. El flequillo me lo he apartado hacia la derecha, y lo he recogido con una horquilla. En cuanto a joyería, tan solo me he puesto un colgante plateado, en forma de espiral. Cuando se seca la mascarilla facial, me la retiro, y empiezo a pintarme. Raya, sombra de ojos negra con un poco de gris por los bordes, rímel, colorete rosado, y gloss con sabor dulce color rosa fuerte (con brillo). Miro la hora: 18:30. Todavía me da tiempo de una buena manicura en Madame elegance. Voy para allá, tapada con una chaqueta negra larga, que tapa mi vestuario (no puedo dejar que nadie me vea antes de la fiesta). Una vez allí, Elvira me saluda con efusión y pregunta:<br />
-¿Qué será hoy?<br />
Le guiño un ojo y descubro poco a poco mi vestido, cuidando que solo ella lo vea.<br />
-¿Qué me va con esto? Había pensado en espirales o estrellitas.<br />
Ella no lo duda ni un segundo:<br />
-Espirales platas sobre negro. Ves con Irene, que ella te arregla. ¡Y, por cierto, me encanta tu peinado!<br />
Le agradezco el cumplido con una inclinación de cabeza, y me dirijo hacia Irene.<br />
-¡Vaya! ¿Vas de cacería?<br />
Sonrío ante el comentario. “Ir de cacería” es lo mismo que “buscar (y encontrar) novio”. Asiento.<br />
-¿Y bien?<br />
-Espirales plateadas sobre negro, dice la jefa.<br />
Abre las manos, esperando que pose las mías encima. Y así lo hago.<br />
-Oh! Qué pena me da borrártela…me quedó tan bien…<br />
Dice, al ver mi manicura francesa, ya que la hizo ella misma.<br />
-Tranquila, mañana o pasado vuelvo a por otra.<br />
-Eres una de nuestras mejores clientes ¿lo sabías? ¡Sin ti y tus amigas el negocio se muere!<br />
Río, porque sé que es verdad, somos unas clientes habituales: eso es indiscutible. Mientras hace de mis uñas una obra de arte, charlamos sobre cosas banales. Una hora y cuarto más tarde estoy en casa de nuevo, con espirales plateadas sobre negro fondo, mis uñas están mejor que nunca.<br />
Me hago la cena, ligera y me la termino enseguida. Lavo mis dientes, y una vez termino con eso, elijo el bolso. Tras muchas dudas y una video-llamada a Rachel, decido que un mini bolso negro, liso, con un broche en forma de espiral (que en realidad es para la ropa) como cierre será mi accesorio. Lo lleno con pintalabios (aunque es efecto duradero) y demás cosméticos, el inhalador (lo cojo más por costumbre que por otra cosa), las horquillas y el dinero. Maddy viene a buscarme (Sandra ya está con ella), los saludo a todos, y dejo que me halaguen, tras devolverles los cumplidos, subimos al coche. Llegamos a las carpas. Son como tiendas de campaña de lujo muy agrandadas y hay varias. Buscamos a Rachel, y a unos cuantos chicos, y nos vamos a P-C una de las mejores carpas.<br />
P-C está llena a rebosar, pero nos da igual, bailamos durante un rato, y, antes de darme cuenta me ofrecen un cubata. Dudo unos instantes, miro a mí alrededor, y veo a mis amigas alzando los vasos de plástico para brindar. «Tan solo es un vasito»…pienso, mientras lo alzo yo también. Bebo.<br />
-¿Chicas, que tal si nos conocemos mejor?<br />
Dice un tipo que se ha quedado prendado de la purpurina de Sandra. Reimos.<br />
-Sí, claro ¿Por qué no?<br />
-Vale, ¿todos sabeis de que va el “yo nunca”?<br />
Rachel asiente, y Maddy también, sin embargo, yo niego junto con Sandra.<br />
-Bien, se juega así: Alguien dice “Yo nunca he…” lo que sea. Y si el siguiente lo ha hecho, bebe, si no, pues no bebe. Una vez ha bebido (o no) dice “yo nunca…” y cambia lo que sea que no ha hecho nunca, y lo pasa, y así sucesivamente.<br />
-¡Vale!<br />
Todas asienten, emocionadas, claro, todas menos yo. Empieza Rachel:<br />
-Yo nunca…me puesto colonia barata.<br />
Se lo pasa a Sandra:<br />
-No bebo. Yo nunca…<br />
Y la siguiente hora transcurrió entre confesiones embarazosas (las preguntas cada vez se volvían más fuertes. Rachel salió con una fuerte borrachera, y yo bastante sorprendida por lo que había llegado a hacer. El pesado ese que había propuesto el juego (del cual ahora se más de lo que me gustaría) estaba con Sandra haciendo a saber qué. Maddy me ofreció una cerveza, fui a rechazarlo, pero dijo:<br />
-¡Oh! ¡Venga ya! ¡Si no pasa nada! Tu madre no te pillará…se supone que estarás dormida ¿no? ¿O es que tienes miedo? O te he visto beber casi nada…<br />
«Ya te recordaré esto cuando tengas resaca mañana». Cojo el vaso, y bebo la mitad de golpe. Maddy, satisfecha, sigue andando, y, cuando no mira, tiro el resto de la amarga bebida en la alcantarilla. Sobre la media hora le pido que me devuelva a casa.<br />
-¿A casa? ¿Te vas? ¡Justo ahora que se pone divertido! Bueno… ¡Pablo!<br />
El chico vino hacia ella, obediente. Si Rachel parecía borracha, este la doblaba. Ni siquiera andaba en línea recta, y tenía otra copa en la mano.<br />
-¿Qué pasa?<br />
-Ya te lo he dicho esta tarde: Tenemos que devolver a mi amiga o la degollan.<br />
-¿Eh? ¿Ahora? ¡Anda ya! ¡Búscate a otro hermosura!<br />
Y giró.<br />
-¿Cómo? ¿Y ahora yo que hago? ¡Maddy!<br />
-Bueno, da igual, seguramente no se da cuenta… ya buscaré a otro, espera una hora o así y ya está.<br />
-¿Una hora? ¡Maddy, no me queda tiempo!<br />
-¡Ay! ¡Bueno, pues es lo que hay! ¿Qué culpa tengo yo de que no tu madre te deje hacer nada?<br />
-De eso, ninguna. ¡De lo que tienes culpa es de haberme prometido que no pasaría nada y ahora haberme dejado tirada! Como me pillen…<br />
-Tranquila… oye, ¿Por qué no disfrutas de la fiesta?<br />
-¡PORQUE ME VAN A MATAR!<br />
-¡Bueno, bueno, no te sulfures!<br />
Vi que no captaba la gravedad de la situación, así que lo dejé correr. Fui hacia la salida del solar y emprendí el camino sola.<br />
Tras unos cinco minutos caminando, vi tres figuras perfiladas en la noche. «A lo mejor me acompañan o tienen coche y me llevan…», así que, para llamar su atención, grito:<br />
-¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡EOOOOOOOOOH!!!!!!!!!!!!!! ¡ESPERAD!<br />
Las figuras se pararon, y giraron, sorprendidas de que hubiera alguien más por ahí. Las reconocí, eran…Unknownnoreply@blogger.com4tag:blogger.com,1999:blog-3489768971605707305.post-5869731542122527142012-01-28T11:45:00.000-08:002012-01-28T11:45:44.355-08:00Ya tenemos nombree!La historia se va a llamar Somewhere over the death. La primera parte ya está lista (gracias a Cotic) y la lista de turnos se tendría que actualizar. Por lo demás, el proyecto va viento en popa!! :D<br />
Kami.Unknownnoreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-3489768971605707305.post-78889085526462920512011-12-11T11:14:00.001-08:002012-04-06T05:24:33.440-07:00Personajes :D<em><span style="color: #351c75;">Haber, puesto que este blog, es deuna Historia Colectiva, tenemos los personajes MUY POCO asignados, por ahora, hay mucha gente apuntada, y muy poca directa, a si que POR FAVOR, DECID QUE PERSONAJE QUEREIS!</span></em><br />
<br />
<em><span style="color: #351c75;">*Rossana (Cotic)<br />
*Nathan (Marina)<br />
*Tamara (<strike>Silena </strike> Cotic)<br />
*Sawn (Kami)<br />
*Rossana (Ines)<br />
*Nathan (?)<br />
*Tamara (Besa)<br />
*Sawn (?)<br />
*Asesino (Kami)<br />
*Rosana (Iris_Iris)<br />
*Nathan (?)<br />
*Tamara (sarita)<br />
*Sawn (?)<br />
*Rossana (?)<br />
A partir de aquí se repite, de forma que a Cotic, le tocaría Nathan, a Marina Tamara....</span></em><br />
<em><span style="color: #351c75;">Como veis, faltan MUCHOS personajes, por favor, decidlo, si no, esto no avanza!! ;)</span></em><br />
<em><span style="color: red;">Lamentablemente, algunos componentes han dejado la historia, así que puede que esto nos retrase de vez en cuando, disculpadnos.</span></em>Unknownnoreply@blogger.com6tag:blogger.com,1999:blog-3489768971605707305.post-8386730452529903142011-12-11T03:31:00.000-08:002011-12-11T03:31:00.764-08:00¿Que es nube de palabras?<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><span class="Apple-style-span" style="color: red;">¿</span><span class="Apple-style-span" style="color: orange;">Que</span> <span class="Apple-style-span" style="color: yellow;">es</span> <span class="Apple-style-span" style="color: lime;">nube</span> <span class="Apple-style-span" style="color: cyan;">de</span> </span><span class="Apple-style-span" style="color: blue; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">palabras</span><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><span class="Apple-style-span" style="color: red;">?</span></span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Nube de palabras es un blog pensado para poner las diversas historias colectivas de PA ¡Esperamos que os guste!</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><span class="Apple-style-span" style="color: red;">¿</span><span class="Apple-style-span" style="color: orange;">Que</span> <span class="Apple-style-span" style="color: yellow;">es</span> <span class="Apple-style-span" style="color: lime;">una</span> <span class="Apple-style-span" style="color: cyan;">historia </span><span class="Apple-style-span" style="color: blue;">colectiva</span><span class="Apple-style-span" style="color: red;">? </span></span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Una historia colectiva, es una historia que crean diversos escritores unidos: cada uno de nosotros hará un capítulo.</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><span class="Apple-style-span" style="color: red;">¿</span><span class="Apple-style-span" style="color: orange;">Cual </span><span class="Apple-style-span" style="color: yellow;">será</span> <span class="Apple-style-span" style="color: lime;">la</span> <span class="Apple-style-span" style="color: cyan;">primera </span> <span class="Apple-style-span" style="color: blue;">historia </span><span class="Apple-style-span" style="color: purple;">colectiva</span><span class="Apple-style-span" style="color: red;">?</span></span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"> La primera historia colectiva trata de unos chicos (Rossana, Nathan, Tamara y Sawn) que entran en una casa y encuentran un cadaver. La policía lo toma por suicidio, pero no es así: nuestros protagonistas decubren que es más que eso, es un asesinato. En contra de lo que haría cualquier persona normal, intentan resolver el misterio (¿Que clase de historia habría si no?). Sin embargo, este no es un asesinato común, es un asesinato algo más...peculiar.</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br />
</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="color: #8e7cc3; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><b>¡Todos los participantes esperamos de corazón que os gusten los diversos proyectos que pongamos!</b></span>Unknownnoreply@blogger.com11